SAT NAM CORAZONES!!!
Sobreviví a la diada de Sant Jordi de este 2014, pero caí rendida en el sofá después de mi cita con el Loto Atado y no pude reunir las fuerzas suficientes para alcanzar el ordenador y escribir esta entrada.
El tiempo nos ha dado una tregua y finalmente ha lucido el sol durante la mayor parte del día. Esto me ha dado una energía muy buena para lidiar con todas mis obligaciones en la diada.
Vestir a mis niñas para sus danzas populares en el colegio, los preparativos en el restaurante para la comida especial de Sant Jordi (no se si se habrán vendido muchos libros y rosas, pero afortunadamente, los catalanes siguen prefiriendo celebrar el amor alrededor de una buena mesa y hemos llenado!!), he podido llegar a tiempo al colegio de mis hijas para verlas bailar, después las he llevado al parque, he vuelto a Despertares a dar las clases de yoga de los miércoles y finalmente, he llegado a mi cita con el loto atado, agotada, pero ahí he estado.
He aprovechado la energía creada durante la clase para entrar inmediatamente en la postura justo después de despedir a los alumnos. Únicamente he podido hacer un calentamiento para abrir las caderas mientras ellos se relajaban, pensé que el resto de mi cuerpo estaría bien después de la potente kriya de hoy.
Me he rendido a la postura facilmente, pero ella se ha encargado de desafiarme a los pocos minutos. He empezado a notar las consecuencias de un calentamiento deficiente en mis rodillas y empeines, aunque la respiración y el enfoque me hen ayudado, no he creido conveniente machacarme más. Así que modos, no he querido sobreesforzarme y solo he hecho los primeros 15 minutos en la postura completa. La segunda parte la he hecho en medio loto (cambiando de pierna a la mitad) y con los brazos cruzados detrás de la espalda agarrándome de los codos. No quería volver a sufrir adormecimiento en los empeines como la última vez...
Y de este modo hemos llegado al final plácidamente, incluso he podido armar en mi mente una nueva leyenda de la princesa y el dragón, pero sin caballero. Sí, si... sólos él y yo. Soy una auténtica princesa guerrera, y ya está bien de hacer creer a nuestras niñas de que siempre han de esperar a que venga el caballero o el príncipe a salvarlas....eso no funciona así en la vida real, si no más bien todo lo contrario.
En este mundo de Dios sin duda las mujeres somos las salvadoras. Poseemos el mayor don que existe, que es el milagro de dar vida. Y si podemos hacer eso, podemos hacer cualquier cosa. Pero nos educan equivocadamente y luego de mayores sufrimos las consecuencias.
En la cita de hoy he visto a mi dragón como ese fuego que hay dentro de mí, esa energía que me permite hacer, crear y transformar todo lo que me propongo... pero con mucho cuidado de no derrocharla para evitar hacer daño a los demás, no todo el mundo comprende ni esta preparado para esa energía. Es una de mis polaridades, y sin duda alguna alcanzar su maestría es todo un desafío. Estoy aprendiendo a reconocer y elevar esas polaridades para seguir mi proceso de transformación.
Pero en ello estamos y por eso estoy aquí escribiendo estas líneas y postrándome cada día en la postura más difícil, para abrirme a todo lo que esté por llegar, para Ser todo lo que deba Ser y vivir mi destino con Gracia.
QUE EL ETERNO SOL TE ILUMINE, EL AMOR TE RODEE y LA LUZ PURA INTERIOR GUIE TU CAMINO. SAT NAAM.
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